Hay muchas maneras diferentes de enseñanza y aprendizaje de los Derechos Humanos. Cómo abordar el tema dependerá de si se trabaja en el sector formal y no formal, las condiciones políticas, sociales y económicas de tu país, las edades de los jóvenes, y también de sus intereses y motivación para aprender acerca de los Derechos Humanos. También por supuesto, dependerá de tu propia experiencia con las cuestiones relativas a los Derechos Humanos y la Educación en los Derechos Humanos.

Nadie de nosotros sabe lo que todos sabemos.
Lao Tse

Puedes ser un trabajador social de juventud, un instructor, un maestro de escuela o educador de adultos, tutor, miembro de una iglesia, un grupo de discusión o un joven activista. Quien quiera que seas y donde quiera que te encuentres trabajando, confiamos que habrá algo para ti en este manual. No asumimos nada acerca de tu nivel de enseñanza o capacitación o conocimiento previo sobre los Derechos Humanos.

Compass debe ser visto como un recurso flexible. La promoción de los Derechos Humanos es un proceso creativo y, de los cuales tú, como usuario de este manual, eres parte integrante. Esperamos que tomes las ideas que hemos presentado, la utilices y las desarrolles para satisfacer tus propias necesidades y las de los jóvenes con los que trabajas. Esperamos que también revises lo que ha aprendido y nos facilites información sobre tus experiencias. Hay un formulario de comentarios en www.coe.int/compass.

¿Qué hay en Compass?

Te sugerimos que comiences por mirar brevemente a través de todo el manual para hacerte una idea general de tu contenido. No hay punto de partida; tenemos la intención de que puedas elegir las piezas que son importantes para ti.

Capítulo 1 : Es una introducción a los Derechos Humanos y la EDH y cómo usar el manual.
Capítulo 2 : Este capítulo contiene las actividades. Aquí encontrarás 58 actividades de diferentes niveles para explorar los Derechos Humanos relacionados con temas seleccionados y los diferentes derechos. Estas actividades son las herramientas para tu trabajo con los jóvenes.
Capítulo 3 : “Acción a favor de los Derechos Humanos”, explica lo que se entiende por “actuar”, y contiene ideas y sugerencias sobre formas de promover los Derechos Humanos en la comunidad y en el resto del mundo.
Capítulo 4 : Este capítulo proporciona información acerca de los Derechos Humanos y su desarrollo histórico junto con las normas y documentos internacionales.
Capítulo 5 : Aquí encontrarás información de apoyo sobre los temas globales de Compass.
Anexos: Resúmenes de las principales declaraciones, convenciones y textos sobre los Derechos Humanos, y un glosario de términos utilizados con frecuencia.

Debe haber suficiente material para que puedas comenzar a trabajar en la EDH con jóvenes. Compass se ha escrito para todos los que deseen participar en la EDH si tienen formación o competencias docentes o no. No tienes que ser un “experto” en materia de Derechos Humanos para empezar con un cierto interés en los Derechos Humanos y Educación en materia de Derechos Humanos es suficiente.

Los temas de Derechos Humanos

No podemos esperar para abordar todas las cuestiones relativas a los derechos humanos en este libro. Lo que hemos hecho es tomar los temas considerados más relevantes para la vida de la gente joven y a reunir en 19 temas. Notas de antecedentes sobre cada uno de los temas se presentan en el capítulo 5 y hay referencias cruzadas entre las actividades y los temas que figuran en el resumen de actividades.

Los 19 temas globales (en orden alfabético) son:

  1. Infancia
  2. Ciudadanía y participación
  3. Cultura y deporte
  4. Democracia
  5. Discapacidad y disablismo
  6. Discriminación e intolerancia
  7. Educación
  8. Medio ambiente
  9. Género
  10. Globalización
  11. Salud
  12. Medios de comunicación
  13. Migración
  14. Paz y Violencia
  15. Pobreza
  16. Religión y creencias
  17. Memoria
  18. Guerra y terrorismo
  19. Trabajo

Facilitación

En Compass utilizamos la palabra “facilitadores” para los encargados de preparar, presentar y de coordinar las actividades. Un facilitador es alguien que “hace algo”, que “ayuda”, y que anima a los demás a aprender y desarrollar su propio potencial. Facilitar es crear un ambiente seguro en el cual las personas aprenden a través de la experimentación, la exploración, de dar y de recibir. No se trata de convertirse en un “experto”, que transmite conocimientos a los demás. Sino que todos deben crecer a través del intercambio de experiencias, tanto los participantes como los facilitadores.

Las oportunidades de ser un facilitador para los jóvenes y trabajar en una atmósfera de igualdad y cooperación difieren en Europa. En el sector de la educación formal, encontramos diferencias en los objetivos y en la filosofía de la educación, las técnicas de gestión de las clases y los planes de estudio. No es habitual que los estudiantes decidan lo que quieren aprender, ni es común que los maestros sean capaces de asumir el rol de facilitador. En el sector no formal hay también grandes variaciones, no sólo en los objetivos y filosofía de las diferentes organizaciones sino también en las actividades y las posibilidades que ofrecen, y los estilos de liderazgo varían desde el autoritario al democrático. Estas diferencias son evidentes tanto entre los países, como dentro de los países.

Todos vivimos y trabajamos en los sistemas educativos y las normas sociales de nuestras propias sociedades lo que hace que resulte fácil pasar por alto u olvidar lo inevitable que es nuestro propio etnocentrismo. Como resultado asumimos con normalidad la manera en la que hacemos las cosas. Puede que sea útil para reflexionar sobre tu propio estilo, práctica y relación con los jóvenes con los que estás trabajando con el fin de desarrollar sus habilidades de facilitación.11

Dispuesto a entregar la responsabilidad de su aprendizaje a los aprehendientes.

Es difícil estar en una posición de liderazgo y “dejar ir” parte del control, pero como facilitador de la EDH tienes que estar preparado para entregar la responsabilidad de su aprendizaje a los participantes y que se responsabilicen de la situación o el problema, para que piensen por sí mismos y lleguen a sus propias conclusiones. Esto no implica que toda la responsabilidad se entregue a los jóvenes. Los facilitadores tienen la difícil tarea de crear espacios seguros para que los jóvenes puedan aprender en un ambiente que sea apropiado para su nivel de madurez y capacidad de participación.

El contexto de las actividades puede sin embargo requerir una mayor adaptación y puede colocar al facilitador, profesor o docente en dilemas más profundos. Por ejemplo, en los casos en que la EDH sea obligatoria para las clases o cursos, esto puede tener implicaciones en los resultados y posiblemente también de las actitudes los estudiantes tengan hacia los Derechos Humanos. Otro aspecto a destacar es el sistema de evaluación que caracteriza a muchos sistemas de educación formal; si sólo lo evaluado se toma seriamente en la escuela.
Ideas útiles sobre cómo hacer frente a esto se puede encontrar en “Educación para la democracia: material de apoyo para la ciudadanía democrática y la educación en materia de derechos humanos"13.

La “técnica” de la facilitación en la escuela o en el aula no es necesariamente muy diferente de contextos de aprendizaje no formales y en las instrucciones de Compass las actividades son completamente pertinentes en ambos contextos.

Solución de problemas como base para la EDH

Las cuestiones relativas a los Derechos Humanos son a menudo polémicas porque diferentes personas tienen diferentes sistemas de valores y, por lo tanto, ven derechos y responsabilidades de forma diferente. Estas diferencias, que se manifiestan como las diferencias de opinión, son la base de nuestra labor educativa.

Dos objetivos importantes de la educación son, en primer lugar, proporcional a los jóvenes las competencias de apreciar, sin tener que estar necesariamente de acuerdo con, diferentes puntos de vista sobre un tema y, en segundo lugar, ayudarles a desarrollar las habilidades de encontrar soluciones mutuamente aceptables a los problemas.

Este manual y sus actividades se basan en la presunción de que las diferencias de opinión pueden ser utilizadas de forma constructiva en el proceso de aprendizaje. Como en muchas actividades educativas no formales, el objetivo no es tanto llegar a un acuerdo sino que los participantes desarrollen habilidades para pensar críticamente, escucharse mutuamente, expresar sus opiniones y respetar las diferencias de opinión.

Facilitar las actividades y constructivamente los conflictos puede parecer una tarea de enormes proporciones, pero no tiene por qué ser así. Cada actividad tiene “consejos para los facilitadores” y “informaciones adicionales” para ayudarles en su trabajo.

Consejos generales para los usuarios

Debes utilizar Compass para que se adapte a tus necesidades y las necesidades de los jóvenes con los que trabajas. No importa cuales sean las primeras páginas que veas. Puedes utilizar Compass como una fuente de información sobre los Derechos humanos – sobre los principales convenios, que se formularon por primera vez en 1948 y sobre cómo se han desarrollado desde entonces. También puedes utilizar Compass como un compendio de información sobre los Derechos Humanos en relación con la pobreza, con cuestiones de género y otros temas. Sin embargo, son las actividades las que más interesan ya que son las herramientas para promover la EDH.

Cómo elegir una actividad

Antes de hacer cualquier otra cosa, tienes que tener muy claro en tu mente lo que deseas lograr para fijar tus objetivos. A continuación, puedes pasar a elegir una actividad que sea relevante para el tema que deseas abordar y a continuación con el que tu y los jóvenes con los que trabajan os sintáis cómodos. Debe tener el nivel adecuado para ti y tu grupo y encajar en el tiempo que tienes disponible.

Lea cuidadosamente la actividad al menos dos veces y trate de imaginar cómo puede reaccionar el grupo y algunas de las cosas que se dirían. Es muy probable que se desees cambiar la actividad de alguna manera, o al menos ajustar algunas de las preguntas de la “reflexión y evaluación” para que el aprendizaje que se desea que suceda. Asegúrese de que tiene todos los materiales que se necesitan. Verifica que habrá suficiente espacio, especialmente si los participantes se tienen que dividir en grupos pequeños de trabajo.

Cada actividad se presenta en un formato estándar. Los iconos y los subtítulos se utilizan para que sea más fácil obtener una visión de conjunto.

Los símbolos y subtítulos de las actividades
Temas

Los temas son los que hemos elegido para presentar en el Compass, por ejemplo los Derechos Humanos en general, la pobreza y la salud.
Los Derechos Humanos son interdependientes e indivisibles, y los diferentes temas se superponen, lo que significa que cada actividad se relaciona inevitablemente con varios temas. Señalamos los tres temas con los que la actividad se relaciona.

Complejidad

Por la complejidad deseamos indicar tanto lo complejo que es el método en sí como el pensamiento crítico, analítico y las habilidades de comunicación necesarias de los participantes de esta actividad.

La mayoría de las actividades que requieren habilidades básicas también tienen un método simple, requieren poca preparación y no suelen durar mucho tiempo. Por otro lado, las actividades que requieren una buena comunicación y habilidades de pensamiento a menudo se dividen en una sucesión de elementos, necesitan más preparación y requieren más tiempo.

Las actividades en el nivel 1 son cortas y simples. Sin embargo, estas actividades tienen gran valor por la forma en que hacen interactuar a las personas y comunicarse con los demás. Las actividades “activadoras”, “rompehielos” o de revisión pertenecen a esta categoría.
Las actividades en el nivel 2 no requieren un conocimiento previo de las cuestiones de los Derechos Humanos o de un buen desarrollado personal o de gran capacidad de trabajo en equipo. Muchas de las actividades de este nivel están diseñadas para ayudar a las personas a desarrollar su comunicación y capacidad de trabajo en equipo, y al mismo tiempo estimular el interés por los Derechos Humanos.
Las actividades en el nivel 3 son más complejas y están diseñadas para lograr una percepción y comprensión mayor de un problema. Demandan mayores niveles de competencia en discusión o capacidad de trabajo en equipo.
Las actividades en el nivel 4 son mayores, requieren de un buen trabajo en grupo y técnicas de discusión, de la concentración y la cooperación de los participantes y también de más preparación. También son más amplias y ofrecen una mayor y mejor comprensión de las cuestiones.

Tamaño del grupo

Nos indican el número de personas necesarias para ejecutar la actividad con éxito. Si una parte de la actividad implica trabajo en pequeños grupos y el tamaño de los pequeños grupos se indica a continuación entre paréntesis.

Tiempo

Debemos dar una indicación general del tiempo, estimado en minutos, necesario para ejecutar la actividad en su conjunto, incluyendo las sesiones de reflexión y evaluación con el número de participantes indicado. El tiempo estimado no incluye la discusión o las actividades relacionadas con la fase de seguimiento.

Tienes que hacer tu propia estimación de cuánto tiempo necesitarás. Si trabajas con grupos pequeños, a continuación, tendrás que dar un poco más de tiempo para cada uno de sus comentarios en plenaria. Si el grupo es grande, entonces es necesario tiempo para que todos tengan la oportunidad de contribuir a la reflexión y evaluación final.

Descripción general

Nos dan una indicación de la materia y el método básico utilizado en la actividad. Por ejemplo, si la actividad es sobre las personas que buscan asilo, sobre la parcialidad de los medios de comunicación y si implica una discusión en grupos pequeños o un juego de rol.

Derechos relacionados

La capacidad de relacionar experiencias y acontecimientos concretos de Derechos Humanos es un objetivo clave de la Educación en los Derechos Humanos. Sin embargo, dado que los Derechos Humanos son interdependientes e indivisibles, las cuestiones se solapan y cada actividad se relaciona inevitablemente con varios derechos. Por lo tanto, en relación con el resumen de la Declaración Universal, nos indica tres derechos que se ponen de manifiesto en la actividad y que deben ser examinados en las sesiones de reflexión y evaluación final.

Objetivos

Los objetivos se refieren a los objetivos de aprendizaje basados en competencias de la EDH en términos de conocimientos, habilidades, actitudes y valores que se describen aquí.

Materiales

Esta es una lista del equipamiento necesario para ejecutar la actividad.

Preparación

Esta es una lista de comprobación para el facilitador con lo que tiene que hacer antes de ejecutar la actividad.
Damos por sentado que los facilitadores se informarán sobre las cuestiones y leerán la información básica en el capítulo 5, si es necesario. Por lo tanto, este no se repite en cada actividad.

Instrucciones

Esta es una lista de instrucciones sobre cómo llevar a cabo la actividad.

Reflexión y evaluación final

Aquí se sugieren preguntas para ayudar al facilitador a realizar la reflexión y evaluación final. Están destinadas a ser una guía y tendrás que desarrollar por lo menos algunas de tus propias preguntas para asegurarte de que extraes los puntos de aprendizaje asociados a tus objetivos.

Consejos para los facilitadores

Estas son notas de orientación y explicaciones sobre el método y las cosas que deben tenerse en cuenta. Por ejemplo, si está trabajando con los estereotipos acerca de las minorías, ¿hay alguien de esa minoría en tu grupo?

Variaciones

Aquí presentamos algunas ideas sobre cómo se puede adaptar la actividad para ser utilizada en diferentes situaciones y cómo desarrollarla. Sin embargo, estas son sólo sugerencias y el facilitador tiene que sentirse libres para modificar la actividad en la forma que desee y que mejor satisfaga las necesidades del grupo.

Sugerencias para el seguimiento

La ejecución de una actividad no es suficiente; se necesita una etapa de seguimiento para que el aprendizaje se refuerce y no se olvide. Además tenemos que recordar que un objetivo importante de la EDH es permitir a los jóvenes a tomar decisiones sobre las cuestiones que les conciernen.

Por lo tanto, presentamos algunas ideas de lo que hay que hacer a continuación, por ejemplo, sugerencias sobre temas a investigar en la biblioteca local o en Internet que luego pueden ser presentados a todo el grupo.
También te dan ideas para otras actividades que quizá te gustaría probar próximamente.

Ideas para la acción

Llevar a cabo acciones es un objetivo importante de la EDH; queremos dar a los jóvenes la capacidad para adoptar medidas sobre cuestiones que les conciernen. Hacemos hincapié en esto que es la razón por la que tenemos un capítulo aparte sobre la acción, el Capítulo 3, y por lo que se incluyen ideas para la acción en cada actividad.

Fechas clave

Las Naciones Unidas y muchas otras organizaciones utilizan la idea de un día de fiesta o día del recuerdo a atraer la atención del público a los distintos aspectos de los Derechos Humanos. Hemos reunido más de noventa “fechas clave” que sugerimos que se utilicen como puntos de apoyo para apuntalar tus propias acciones. Por ejemplo, un grupo de jóvenes en busca de asilo en Dinamarca se unió a la rama local de Cruz Roja de la juventud danesa que tiene una cafetería, y celebró un evento público en el Día del Refugiado, el 20 de junio.

Información adicional

Aquí te damos información sobre antecedentes adicionales estrictamente pertinentes para la actividad. En cualquier caso te recomendamos consultar el capítulo 5, donde puedes encontrar la información pertinente para el tema particular que se aborda en la actividad.

Documentación

Estas son las tarjetas de papel, las hojas informativas y las cartas de debate cartas que tendrás que copiar. Debes sentirse libre para modificarlas y satisfacer las necesidades de tu grupo.

Consejos generales para ejecutar las actividades

Las actividades rara vez van exactamente de la forma que se espera. Esto es, a la vez, la recompensa y el desafío de trabajar con las actividades de Compass. Tienes que ser capaz de responder a lo que está sucediendo y a pensar al ir avanzando. Los elementos principales que se deben recordar son: establecer objetivos claros y estar preparados.

Co-facilitar

Si es posible, facilita siempre junto con otra persona. Los maestros lo denominan “enseñanza en equipo”. Hay ventajas prácticas en este sentido; habrá dos personas para compartir la responsabilidad de ayudar a los pequeños grupos de trabajo o tratar con las necesidades individuales. Cuando dos personas llevan a cabo una sesión, es más fácil modificar el ritmo y mantener el interés. Dos facilitadores pueden apoyarse mutuamente si las cosas no salen según lo previsto y también es mucho más gratificante revisar con alguien más en lugar de hacerlo solo.

Co-facilitar requiere tanto que los facilitadores preparen conjuntamente la actividad como que cada uno de ellos esté seguro de su función. Es mejor todavía desarrollar actividades en equipo, preferentemente implicando a los jóvenes.

Preparar cuidadosamente

Asegúrate de haber leído toda la información sobre la actividad, preferiblemente dos veces. Ejecútala en su cabeza; trata de visualizar cómo sucede. Trata de imaginar cómo va a reaccionar el grupo y qué van a decir. Inevitablemente formularán preguntas, de las que no sabrás la respuesta. Pero así debería ser; para aprender también ahí con los jóvenes. No obstante, deberías asegurarte de que estás razonablemente bien informado a través la lectura de la información de apoyo.

Asegúrate de que tiene todos los materiales que necesitas a mano, y un poco más en el caso de que haya más participantes de lo esperados, a alguien se le rompe un lápiz o el rotulador no funciona.

Gestión del tiempo

Planifica cuidadosamente y no trates de meter demasiado en el tiempo disponible. Si la actividad está llevando más tiempo del previsto, tendrás que tratar de acortarla de manera que haya tiempo de sobra para el debate (ver notas del ciclo de aprendizaje). A menudo es una buena idea involucrar a los participantes y consultar con ellos sobre la posibilidad de acabar inmediatamente, en cinco minutos, o si no, cómo resolver el problema.

Por otro lado, si tienes una gran cantidad de tiempo disponible, no intentes arrastrar la discusión, haz una pausa o haz una rápida actividad activadora para la diversión.

Creación de un entorno seguro

Los jóvenes con los que estás trabajando con deben sentirse libres para explorar y descubrir, interactuar y compartir con los demás. Se auténtico, simpático, alentador y con un buen sentido del humor. No utilices jerga o lenguaje que los participantes no entiendan. Las personas se sienten seguras cuando saben qué es lo que está pasando, por lo tanto, cómo introducir una actividad es importante. No se puede comenzar de la nada; necesitas colocar la actividad en un marco. Una manera de hacer esto es utilizar un rompehielos.

Establecer las reglas de juego

Es importante que cada uno en el grupo entienda las reglas del juego para la participación en las actividades experienciales. Por ejemplo, todo el mundo debería tener su cuota de responsabilidad a la hora de la sesión, en la que todos deben tener una oportunidad de ser escuchados, de hablar y de participar. Nadie debe sentirse bajo presión de decir algo con lo que no se sienten cómodos. Estas reglas deben ser discutidas y acordadas en el momento en que se empieza a trabajar con una clase o un grupo y puede que te interese revisarlas de vez en cuando, sobre todo cuando haya gente nueva al grupo.

Da instrucciones claras

Siempre asegúrate de que todo el mundo ha entendido las instrucciones y sabe lo que tiene que hacer. Ayuda el empezar explicando en términos generales en lo que consiste la actividad y lo que implica, por ejemplo, que la actividad es un juego de rol. Deja que la gente sepa durante cuánto tiempo tienen que realizar una determinada tarea y avísales cinco minutos para que puedan redondearla.

Facilita las discusiones

La discusión es centrada en la EDH. Presta especial atención en asegurar que todos en el grupo pueden participar si así lo desean. Utiliza las palabras, expresiones y lenguaje comunes al grupo y explica palabras con las que no estén familiarizados, hay un glosario que para ayudarte. Invita a los participantes a dar sus opiniones. Asegúrate de que existe un equilibrio entre aspectos globales y locales para que la gente vea la cuestiones directamente pertinentes para sus propias vidas.

A veces los debates “se atascan”. Tendrás que identificar la causa. Por ejemplo, podría ser debido a que el tema se ha agotado o que es demasiado emocional. Tendrás que decidir si deseas concluir con una pregunta, o cambiar de rumbo. Nunca debes sentir que tienes que dar las respuestas a las preguntas de los participantes o a los problemas el propio grupo debe encontrar sus propias respuestas a través de la escucha de los demás y de compartir. Pueden, por supuesto, pedir tu opinión o asesoramiento, pero el grupo debe tomar sus propias decisiones.

Reflexión y evaluación final

Ninguna actividad de Compass es completa sin la reflexión y la evaluación final; esta parte de la actividad proporciona las claves para el aprendizaje y ayuda a los participantes a poner lo que han aprendido en un contexto más amplio. Proporciona a los participantes un montón de tiempo para completar la actividad y si es necesario para salir del papel antes de entrar en la discusión sobre lo que sucedió y lo que han aprendido. Dedica tiempo al final de cada actividad hablando sobre lo que aprendieron y cómo se relaciona con sus vidas, su comunidad y en el mundo en general. Sin reflexión, las personas no aprenden mucho de sus experiencias.

Te sugerimos que intentes ir a través de la reflexión final y evaluación preguntando a los participantes preguntas referentes a:

  • Lo que sucedió durante la actividad y cómo se sentían
  • Lo que han aprendido acerca de ellos mismos
  • Lo que han aprendido acerca de las cuestiones que se abordan en la actividad y los Derechos Humanos
  • ¿Cómo se puede avanzar y utilizar lo que han aprendido?

Revisar

Sin reflexión, las personas no aprenden mucho de sus experiencias.

La evaluación periódica o en el examen de lo que estás haciendo y aprendiendo es importante ya que ayuda a obtener una visión global de cómo están yendo las cosas, lo que te permite mejorar tu práctica. El cuando hacer la revisión depende de las circunstancias: puede ser al final del día en un seminario o al final de una serie de dos o tres clases o reuniones.

Siempre que revises, debes encontrar el tiempo para relajarte y descansar y reflexionar sobre:

  • Cómo fue la actividad (actividades) desde tu punto de vista: preparación, distribución, etc.
  • Lo que los participantes aprendieron y si se cumplen los objetivos de aprendizaje
  • Cuales son los resultados: lo que el grupo va a hacer ahora como resultado de las actividades que han venido haciendo
  • Lo que aprendiste acerca de los temas y de la facilitación

La revisión periódica con el grupo también es importante y debe ser divertida, así que evita que tu revisión se convierta en otro debate, especialmente si ya has utilizado una cantidad considerable de tiempo a la reflexión y evaluación final. Encontrarás varias técnicas, incluyendo las que utilizar el lenguaje corporal, los dibujos y la escultura en el capítulo 2, bajo el título "Actividades de revisión".

Ritmo

La mayoría de las actividades se pueden realizar dentro de los 90 minutos por lo que no debe ser demasiado difícil mantener el ritmo. No obstante, tomando descansos breves, por ejemplo entre la propia actividad y la reflexión y evaluación final, o entre la reflexión final y evaluación y la discusión sobre la etapa de seguimiento puede ser útil para mantener a los participantes conectados. Si el nivel de energía está realmente cayendo se puede utilizar un activador-energizer. Recuerda también que es importante que los participantes descansen después de hacer una actividad.

Retroalimentación

Retroalimentación es un comentario sobre algo que alguien ha dicho o hecho. Dar y recibir retroalimentación –feedback es una habilidad; ayuda a los miembros del grupo aprender cómo hacerlo–. Demasiado a menudo, aunque no sea la intención del hablante, en la retroalimentación se recibe información crítica destructiva. Las palabras clave con respecto a los comentarios son “respeto”, “concretos” y “argumentos”.

Al dar retroalimentación, es importante respetar a la otra persona, para concentrarte en lo que dice o no y explicar los motivos de tu punto de vista. Puedes decir “estoy totalmente en desacuerdo con lo que acabas de decir porque…” Dar retroalimentación negativa puede ser doloroso y sucede fácilmente a muchas personas. Es tu papel como facilitador encontrar la manera de garantizar que las personas dan información de manera constructiva. Por ejemplo:

  • Asegurar que la gente empiece a dar la retroalimentación con una afirmación positiva
  • Respetando a la otra persona y sin hacer comentarios despectivos
  • Centrándose en el comportamiento, no en la persona
  • Dando razones de lo que están diciendo y por qué
  • Asumir la responsabilidad de lo que dicen con “Yo - mensajes”

Recibir retroalimentación es difícil, especialmente cuando hay desacuerdo. Tu función es la de ayudar a los jóvenes a aprender de sus experiencias y para que les ayuden a sentirse apoyados y no hundidos. Animar a los participantes a escuchar atentamente los comentarios sin expresar de inmediato su propia defensa o su posición. Es especialmente importante que las personas comprendan exactamente lo que la persona que da la retroalimentación dice y tener en cuenta que necesitan tiempo para evaluar lo que se ha dicho antes de aceptarlo o rechazarlo.

Resistencia de los participantes

Participar en actividades participativas es muy exigente y al utilizar una variedad de técnicas, por ejemplo, una discusión, dibujos, juegos de rol o música, es inevitable que no todas las actividades se adapten a todos los participantes todo el tiempo. Si un participante está seguro y es capaz de explicar por qué no les gusta una determinada actividad, a continuación, serás capaz de acomodar sus necesidades a través del diálogo y la negociación.

Por “resistencia”, queremos decir un comportamiento intencionalmente perturbador. Todos los facilitadores experimental resistencia por parte de los participantes en un momento u otro. Esta resistencia puede tomar distintas formas. Una persona joven puede molestar moviendo su silla, haciendo ruidos o hablando con su vecino. Otras formas más sutiles de interrumpir la sesión es preguntar cuestiones irrelevantes o hacer una broma de todo. Otro “juego” es resistir socavando “al facilitador”. Uno podría decir, “no entiendes, hace mucho tiempo que eras joven”, o “no más discusiones, ¿por qué no podemos hacer actividades?” El tercer tipo de “juego” es la de tratar de evitar el aprendizaje, por ejemplo, cuando las personas dicen “sí, pero…”.

Evidentemente, es mejor si se puede evitar la resistencia. Por ejemplo, siendo consciente de cada persona en el grupo y de las emociones sensibles que pueden desencadenarse por una determinada actividad o por una parte concreta de un juego de rol o por una simulación. Asegúrate de que todo el mundo se siente seguro y sabe que no están en ningún momento bajo presión alguna para decir o mostrar algo acerca de sí mismos con lo que no se sientan cómodos. Permite que los participantes “entren en calor” antes de realizar cualquier actividad y que se relajen después.

Por último, recuerda que debéis tener el tiempo suficiente para la reflexión y evaluación final para que cada uno sienta que su opinión y participación es muy valiosa.

Tendrás que decidir por ti mismo la mejor forma de manejar una situación difícil pero hay que tener en cuenta que por lo general, la mejor manera de resolver el problema es ponerlo sobre la mesa para que el grupo en su conjunto encuentre una solución. No entres en largas discusiones o argumentos con un único miembro del grupo. Esto puede causar resentimiento y frustración entre los demás participantes y hará que pierdan el interés.

Gestión de conflictos

Conflicto es una dimensión inevitable y necesaria en la EDH.

El conflicto puede ser útil y creativo si gestiona adecuadamente; de hecho es un ingrediente inevitable y necesario de la EDH. El desacuerdo y la emoción son inevitables cuando se abordan cuestiones relativas a los Derechos Humanos porque la gente ve el mundo de manera diferente y sus creencias, suposiciones y prejuicios se pondrán en tela de juicio. El conflicto como parte de la Educación en los Derechos Humanos da a los participantes la oportunidad de desarrollar sus habilidades y actitudes tales como el pensamiento crítico, la cooperación, la empatía y el sentido de la justicia.

Los conflictos son difíciles de prever y pueden ser difíciles de resolver especialmente si surgen porque los participantes se sienten inseguros en cuestiones relacionadas con las emociones y los valores, si no tienen suficientes competencias para el trabajo en grupo o si tienen planteamientos totalmente diferentes de la cuestión o valores diferentes. Trata de mantenerte tranquilo y fresco y no participar en los conflictos entre los individuos del grupo.

En Compass las actividades están destinadas a brindar experiencias de aprendizaje en un ambiente seguro. Elígelas con cuidado y adáptalas según sea necesario. Utilizalas para sacar de los participantes diferentes opiniones acerca de las cuestiones; que sepan que el desacuerdo es perfectamente normal y que la universalidad de los Derechos Humanos no significa que todos los ven de la misma manera.

Algunas sugerencias:

  • Da tiempo suficiente para la reflexión final y el debate. Si es necesario da más tiempo.
  • Contribuye a aclarar las posiciones, opiniones e intereses.
  • Alivia las tensiones en el grupo. Por ejemplo, pedir a todo el mundo a sentarse o a hablar durante tres minutos en subgrupos pequeños o di algo para poner la situación en perspectiva.
  • Alienta a todos a escuchar activamente a los demás.
  • Subraya lo que une a las personas en lugar de lo que les separa.
  • Busca el consenso. Haz que la gente mire a sus intereses comunes en lugar de tratar de alcanzar una posición intermedia y moverse de sus posiciones.
  • Busca soluciones que pueden resolver el problema sin “recrear” el conflicto.
  • Ofrece hablar con las personas implicadas en privado en otro momento.

Si surgen conflictos más graves y profundos, puede ser mejor posponer la búsqueda una solución y buscar otra oportunidad más adecuada para abordar el problema. Entre tanto se podría estudiar la forma de abordar el conflicto desde otro ángulo. Por otra parte, al postergar un intento de resolver el conflicto se gana tiempo para los involucrados reflexionen sobre la situación y propongan nuevos planteamientos y soluciones.

Los conflictos que surjan en el grupo y la manera de resolverlos puede utilizarse para desarrollar el conocimiento y la comprensión de las causas de los conflictos y dificultades en el mundo en general. Lo contrario también es cierto; el debate sobre los conflictos internacionales puede dar información sobre conflictos mucho más a mano.

Adaptación a tus necesidades de las actividades de Compass

Las actividades de Compass se han probado en una amplia gama de contextos de educación formal y no formal de educación y las opiniones de los usuarios nos dicen que, como dijo Abraham Lincoln: “se puede complacer a algunas personas todo el tiempo y a todas las personas parte del tiempo, pero no se puede complacer a todas las personas todo el tiempo”, lo que es perfectamente razonable. Compass pretende ser una guía para tu trabajo; no es un libro de recetas o un canon escrito sobre piedra.
Los autores de Compass se enfrentaron a dos retos. El primero era el de hacer las actividades lo suficientemente generales para que las cuestiones abordadas sean pertinentes para una amplia audiencia, pero al mismo tiempo lo suficientemente detalladas para que lleguen al corazón de las preocupaciones que algunos grupos específicos pueden tener sobre un problema. El segundo reto es el contrario: presentar actividades que sean lo suficientemente profundas en cuestiones importantes para algunos grupos, pero que fuesen irrelevantes o demasiado sensibles para plantearlas con otros.

Por estas razones, las actividades casi seguro que tendrán que ser adaptadas o desarrolladas para satisfacer las necesidades de los jóvenes con los que estés trabajando. Hay una sección sobre los "métodos básicos" que hemos utilizado en Compass. Comprender cómo las distintas técnicas funcionan te ayudarán a adaptar las actividades.

Adaptar las actividades

Las actividades son las herramientas con las que trabajamos: tendrás que asegurarte que el método que has elegido se ocupa de los problemas que quieres abordar y que el método se adapta a tu grupo.

Es responsabilidad del facilitador afinar, hacer los ajustes y adaptar la actividad para que se ajuste a las necesidades de los jóvenes con los que trabaja.

Aspectos prácticos

Cuando se considera la adecuación del método piensa en los aspectos prácticos:

Complejidad : Si el nivel es demasiado alto, estudia la manera de hacer que la actividad sea más sencilla. Por ejemplo, reduce las preguntas, reescribe las tarjetas o desarrolla otras preguntas para las sesiones informativas y el debate. Si piensas que hay un riesgo de que los participantes se aburran o sientan que se insulta a su inteligencia con una actividad de un bajo nivel de complejidad utilízala como una introducción corta y divertida a un tema.

Tamaño del grupo : Si tienes un grupo grande es posible que necesites más facilitadores y disponer de más tiempo. Si permites más tiempo, debes tener cuidado de que la actividad en sí misma o la reflexión y evaluación final no decaiga. Considera la posibilidad de dividir el grupo en dos para las sesiones de reflexión y evaluación final y, a continuación, deja que ellos lo presenten en plenaria. Si estás haciendo un juego de rol, a continuación, permite que dos personas jueguen juntas o compartan un rol.
Si tienes un pequeño número de participantes y la actividad implica trabajar en pequeños grupos, reduce el número de grupos pequeños en lugar de reducir el número de personas en cada grupo pequeño. De esta manera se mantiene la diversidad de contribuciones en de cada grupo.

Tiempo : Es posible que tengas que considerar la posibilidad de ejecutar la actividad en dos sesiones. Por otra parte, trata de hacer los arreglos necesarios para llevar a cabo la actividad cuando tengas más tiempo, por ejemplo, en una escuela de una doble sesión en el horario. Si trabajas en un club de jóvenes, realiza la actividad en un fin de semana residencial.

Descripción : Aquí encontrarás una breve descripción de la técnica básica en la que se basa la actividad, incluyendo consejos generales sobre el uso del método.

Materiales : ¡Improvisa! Si no tienes ningún papel de rotafolios, a continuación, compra un rollo de papel continuo y córtelo en trozos. Si el espacio es pequeño o lleno de muebles y hay poco espacio para moverse, divide el grupo en pequeños grupos y, a continuación, trata de encontrar otro que sea lo suficientemente grande, o si el tiempo es bueno, ¿por qué no ir fuera?

Preparación : Piensa creativamente. Si deseas copiar algo y no tienes acceso a una fotocopiadora, pero tienes una computadora y una impresora, haz una fotografía digital e imprime copias a través del ordenador.

Instrucciones : Algunas de las actividades tienen dos partes. Es posible que sólo la primera parte te permita cumplir tus objetivos.

Variaciones : Las variaciones necesitarán más o menos tiempo que la actividad original. Permítelo.

Reflexión y evaluación final : Si las preguntas sugeridas no satisfacen tus necesidades, prepara otras. Utiliza las notas la información de apoyo como inspiración. Sin embargo, hay que asegurarse siempre de mantener una conexión explícita con las cuestiones de Derechos Humanos.

Sugerencias para el seguimiento de las actividades : Si las sugerencias recomendadas no son las adecuadas, o son irrelevantes o presentan problemas prácticos encuentra otras. Utiliza el resumen de las actividades para encontrar una actividad de seguimiento.

Ideas para la acción : Si las sugerencias recomendadas no son las adecuadas, o son irrelevante o presentan problemas prácticos encuentra otras. Consulta el capítulo 3 sobre “Acción a favor de los Derechos Humanos”.

Desarrollo de actividades

Desarrolla una actividad es más radical que adaptarla. Es posible que te guste el contenido, por ejemplo, de las tarjetas con afirmaciones o las tarjetas de rol presentan con una actividad, pero que encuentres otro método que sea más adecuado. Puedes utilizar por ejemplo algunas de las tarjetas de la actividad “Sólo un minuto” y utilizar el método elaborado en la actividad “¿Cuál es su posición?”.

O quizás es posible que desees trabajar en los temas de asilo y los refugiados como en la actividad “¿puedo entrar?” pero sientas que, por una u otra razón, que un juego de rol como se describe no es adecuado. En este caso aún se puede dividir el grupo en los grupos como se describe y distribuir las tarjetas de rol, pero, a continuación, utilizar la tecnica de discusión “la pecera” y permitir que dos refugiados y dos oficiales de inmigración discutan en ese momento. Otra opción, sobre todo para los maestros que trabajan con una gran clase, podría ser la de mantener un debate de mesa redonda o bien podemos dejar que todos los participantes sean informada sobre los problemas descritos en las tarjetas y, a continuación, celebrar un debate completo sobre, por ejemplo, “Esta clase cree que todos los refugiados deben ser bienvenidos en nuestro país”.

Consejos generales

Anima a los jóvenes a ser conscientes de lo que está sucediendo en el mundo que les rodea, tanto a nivel local como a nivel mundial, y toma las cuestiones que les interesan como el punto de partida de tu trabajo y su trabajo. Intenta siempre implicar a los jóvenes en la toma de decisiones sobre cómo y qué es lo que desean aprender. Lo que se trata, en la práctica, dependerá de si trabajas en un ambiente informal o formal de educación, de las edades de los jóvenes, del tiempo del que dispongas y de los recursos. Sin embargo, siempre que sea posible implica a los participantes a la hora de decidir qué tipo de actividades les gustaría hacer.

Los participantes no deben sentir vergüenza o verse obligados a revelar más de lo que deseen acerca de ellos mismos o sus creencias.

Aborda los temas controvertidos o provocadores con previsión y cuidado. Si un tema es tabú dentro de tu sociedad y es probable que provoque resistencia de las autoridades o personas competentes, examina la posibilidad de abordar la cuestión desde otra ángulo en lugar de frontalmente, o en un marco distinto. Por ejemplo, hacer que la gente reflexione sobre derechos relativos a la libertad de expresión mediante el uso de un ejemplo histórico. Preguntas acerca de la religión, los derechos de las personas, LGBT y los derechos en el matrimonio y la familia son tratadas de este modo en la actividad “Creyentes” o “Pronto obsoleto”.

La realidad que vivimos, en un mundo donde hay algunas cuestiones controvertidas o conflictivas, es importante la EDH. Pero al tratar los derechos relacionados con cuestiones polémicas o provocadoras debes garantizar que los participantes se sientan seguros y que no se sientan avergonzados o se hayan visto obligados a revelar más de lo que desean acerca de ellos mismos o sus creencias. Métodos tales como el ejercicio de la declaración o el estudio de casos son buenos para crear una cierta distancia entre la persona y el tema. Otro enfoque es alentar a los participantes a investigar diferentes puntos de vista. Podrías, por ejemplo, invitar a alguien con una perspectiva minoritaria a hablar con el grupo.

Si las personas de tu grupo se dividen en un determinado asunto, por ejemplo, si una minoría piensa que una determinada cuestión no es importante ni relevante para sus vidas, pregúntales directamente a ellos para que expliquen y justifiquen sus opiniones. Necesitarás captar su imaginación para que se abran a la idea de explorar la cuestión. Mostrar una película, hacer una visita a un centro de refugiados, a un centro para personas sin hogar a una tienda o café étnico o invitar a un experto son buenas maneras de excitar la curiosidad.

Cuando los jóvenes están estudiando la posibilidad de emprender acciones tendrás que estar preparado para aconsejarles acerca de las consecuencias de lo que se proponen hacer. Deben ser plenamente conscientes de los posibles o probables resultados personales, sociales y políticos de la acción propuesta. Alentar a los jóvenes a pensar por sí mismos y a asumir responsabilidades es un objetivo importante de la EDH; por lo tanto, debes describir las dificultades que prevés, dar razones de tus opiniones y aconsejar. Si necesitas persuadirles de que algunas formas de acción no son aconsejable debes sugerir alternativas (consulta el capítulo 3 sobre “Actuar a favor de los Derechos Humanos” para encontrar ideas sobre diferentes formas de actuar.

Particularidades para los maestros

Las reacciones de los maestros nos dicen que Compass se utiliza en las escuelas de toda Europa en las clases de lengua, geografía, historia y ciudadanía y en estudios políticos. Por ejemplo, en las clases de lengua las citas en la actividad “Todos iguales, todos diferentes” se pueden utilizar como textos para desarrollar su vocabulario y comprensión y “Sólo un minuto” se puede utilizar para desarrollar habilidades orales. Las estadísticas, por ejemplo, sobre el trabajo infantil, la diferencia de género y el acceso a la educación (que se pueden encontrar en las diferentes secciones de la información de apoyo en el capítulo 5) se puede utilizar en clase de matemáticas para sustituir los ejemplos de los libros y, de ese modo, contribuir a una mayor conciencia e interés hacia las cuestiones relativas a los Derechos Humanos. “Red de la vida” se puede utilizar en lecciones de biología como una introducción a las enseñanzas de las cadenas alimentarias o la diversidad biológica; “Una historia de dos ciudades” en los estudios sociales; “Creyentes” en la educación religiosa; “Historia de Ashique”“Ten cuidado que estamos mirando” añade otro punto de vista sobre el comercio en las lecciones de Geografía y ejemplos de los “Combatientes de los derechos” en las enseñanzas en los asuntos mundiales. Las posibilidades son infinitas.

Puede haber problemas fundamentales para los objetivos de la EDH en un aula.

Hay que reconocer que hay algunos desafíos fundamentales a los objetivos de la educación en una clase. Por ejemplo, un típica hora de clase puede ser demasiado corta para completar todas las actividades pero el menor o los alumnos pueden no estar en condiciones de influir en las decisiones acerca de lo que aprenden. Además, las opciones de aplicación de lo que han aprendido puede ser más limitada, pero estas dificultades no son insuperables. Por ejemplo, los maestros están encontrando maneras de superar problemas tales como las presiones e horarios ampliando una actividad a dos clases o mediante otras oportunidades durante las “semanas temáticas”, cuando el horario habitual se suspende.

En algunos países la EDH requiere un cambio en el trabajo del aula con el fin de alejarse de la “tiza y hablar” (el profesor dando los alumnos información que ha de ser aprendida de memoria) y avanzar hacia estimular el pensamiento crítico y el aprendizaje más independiente. En países donde los maestros no tienen normalmente el papel de formador, asesor o facilitador, los cambios se han introducido de forma gradual para que los maestros y los alumnos se sientan seguros trabajando en una atmósfera democrática donde se cuestiona y hay libertad de expresión. La comprensión de los métodos y técnicas que se utilizan en el Compass, ayuda a los maestros a hacer cambios; estos se describirán a continuación e incluyen consejos para organizar debates en clases grandes. Otra manera de desarrollar las habilidades de facilitación es a través del trabajo en conjunto, con alguien con experiencia en este tipo de trabajo. Por ejemplo, invitar a un formador de una organización local de Derechos Humanos para que se lleve a cabo la sesión, solo o contigo en equipo.

Lo ideal sería que los maestros de todas las asignaturas estuvieran sistemáticamente formados en las competencias relevantes a través de su formación. La publicación “Cómo todos los maestros pueden apoyar la educación para la ciudadanía y en los Derechos Humanos: un marco para el desarrollo de competencias” puede proporcionar una mayor orientación sobre la manera en que podría hacerse.12

Una serie de problemas prácticos se identificaron en un reciente proyecto de investigación de pequeñas con actividades vivenciales de Compass y de Todos diferentes, todos iguales en las clases de lengua danesa en colegios.

La investigación reveló que las actividades en sí mismas se disfrutaron mucho y los maestros señalaron que consistía en que a los estudiantes. Sin embargo, se han encontrado algunas dificultades en las sesiones de reflexión y evaluación final. Los estudiantes encuentran que es difícil salir de su manera normal de estar en el aula de clase y sus comentarios iban dirigidos a los maestros y no de unos a otros, lo que significa que no hubo mucho diálogo ni libre intercambio de ideas de igual a igual. Los estudiantes esperan un comentario o corrección del maestro que a la vez les invite a hacer uso de la palabra. El resultado fue que los estudiantes tienden a usar su tiempo pensando en lo que querían decir, en lugar de escuchar lo que se dice y responder a otro. Además, resultó difícil cambiar la dinámica habitual del aula, de forma que los estudiantes dominantes dominaron y los graciosos hacían gracias.

La EDH no puede imponerse o dictarse.

Las conclusiones fueron que las actividades en el aula pueden ser valiosas, ya que involucran a los estudiantes en el tema, pero es probable que existan limitaciones hasta sobre que punto todos los objetivos de la EDH pueden ser alcanzados, especialmente aquellos referidos al desarrollo de la cooperación, de las capacidades de asumir responsabilidad y actuar, pueden ser alcanzados. Sin embargo, las escuelas pueden hacer contribuciones significativas al desarrollo de algunas de las competencias que se enumeran aquí, como resultado de la EDH, por ejemplo la escucha activa y las técnicas de comunicación, el pensamiento crítico y la curiosidad. De igual modo, a primera vista podría parecer que emprender acciones puede ser problemático en el ámbito escolar. Sin embargo, las acciones pueden significar muchas cosas diferentes, y en el aula, podrían significar una mejora en el comportamiento general, más atención a sus compañeros, que los alumnos decidan por sí mismos para obtener más información acerca de los héroes de los Derechos Humanos, o tener un planteamiento más crítico de las cuestiones históricas. Hay más ideas acerca de cómo emprender acciones en el Capítulo 3.

Si es difícil para los docentes usar muchas de las actividades, deben tener en cuenta que la EDH también tiene que ver con el desarrollo de conocimientos y la comprensión. Por ejemplo, el conocimiento de lo que son los Derechos Humanos, su desarrollo histórico, los instrumentos jurídicos, y la relevancia de los Derechos Humanos para el desarrollo de la sociedad civil y la paz en el mundo; todos ellos pueden tener su lugar en el sistema de educación formal. La información de apoyo sobre los Derechos Humanos y los temas globales (capítulos 4, 5 y los apéndices) son un valioso material de enseñanza y aprendizaje en si mismos.

Los maestros que trabajan con niños de 7 a 13 años también pueden echar una mirada más atenta a Compasito, el manual para la Educación en los Derechos Humanos con los niños, cuyas actividades encajan mejor en la estructura de clases escolares.

Finalmente, un comentario sobre lo que significa que una enseñanza que pretenda ser EDH, debido a la forma en que se realiza, no cumple los requisitos para ser reconocida como tal. Hay muchas maneras de ofrecer EDH, pero, como se explica al comienzo de este capítulo, el proceso es importante. Por lo tanto, para cualquier tipo de enseñanza relacionada con los Derechos Humanos, para que sea reconocida como EDH debe realizarse de forma que respete a los alumnos y les permita respetar y valorar los Derechos Humanos. La EDH no puede imponerse o dictarse. Por otra parte, la EDH no puede ser vista como algo que se lleva a cabo en el aula, sino que debe extenderse a toda la escuela y a la comunidad en general.

Métodos básicos que sustentan las actividades de Compass

La comprensión de los métodos o técnicas básicas que sustentan las actividades de Compass es esencial a fin de utilizar las actividades correctamente.

Llamamos a los métodos que utilizamos “actividades” porque los participantes están mentalmente activos y generalmente también físicamente activos. Pero las actividades son algo más que algo para llenar el tiempo: tienen claros objetivos educativos y las usamos con un propósito. A veces actividades se denominan “juegos”. Esto implica que las actividades también son divertidas, lo son. Lamentablemente, algunas personas asocian la palabra “juego” con lo que los niños pequeños juegan y se olvidan del subyacente gran valor educativo de los juegos.

La comprensión de la metodología básica te ayudará a la necesaria adaptación las diferentes actividades para satisfacer las necesidades de los jóvenes con los que trabajas y a desarrollar tus propias actividades. Por otra parte, al escribir las instrucciones de cómo ejecutar las actividades, hemos asumido que los usuarios saben y entienden términos como “trabajo en grupo”, “ideas” y “juego de rol”. Por ello los clarificamos aquí.

Trabajo en grupo

El trabajo en grupo es la base de muchos de los ejercicios; ocurre cuando las personas trabajan juntas, combinan sus diferentes capacidades y talentos y se apoyan en cada uno de sus puntos fuertes para completar una tarea. El trabajo en grupo:

  • Alienta a responsabilidad. Cuando las personas se sienten dueñas de lo que están haciendo, por lo general están comprometidas con el resultado y tienen cuidado para asegurar un buen resultado.
  • Desarrolla las habilidades de comunicación. Las personas necesitan escuchar y entender lo que dicen los demás, para ser capaces de responder a sus ideas y poder aportar sus propios pensamientos.
  • Desarrolla la cooperación. Las personas pronto aprenden que cuando están trabajando hacia un objetivo común lo hacen mejor si cooperan que si compiten entre ellos.
  • Implica capacidad de toma de decisiones. Las personas aprenden rápidamente que la mejor forma de tomar decisiones es ver toda la información disponible y tratar de encontrar una solución que satisfaga a todos. Alguien que no se siente en el proceso de toma de decisiones puede perturbar la labor del grupo de trabajo y no aceptar las decisiones que se tomen con el resto del grupo.

Es importante tener en cuenta que el trabajo en grupo exitoso debe estar orientado a una tarea; tiene que haber una clara pregunta que necesita respuesta o un problema que claramente exige soluciones. No es productivo decirles a los jóvenes simplemente “discutid el tema”. Cualquiera que sea el tema, es fundamental que el trabajo esté claramente definido y que los participantes se centren en la acción hacia un objetivo que requiere de la retroalimentación de todo el grupo. Esto no significa que el producto es lo único que importa. La cuestión es que en un trabajo conjunto con un marco claramente definido los participantes están en mejores condiciones de aprender a través de todo el proceso.

La mayoría de las actividades de Compass utilizan un pequeño grupo de trabajo en la “experiencia” (la actividad) y de trabajo en grupo grande en las fases “reflexivas” y “de generalización” en el ciclo de aprendizaje (la reflexión y evaluación final). Los pequeños grupos de trabajo animan a todos a participar y ayudan a desarrollar el trabajo en equipo cooperativo. El tamaño de un pequeño grupo dependerá de las cosas prácticas, como cuántas personas hay en total y la cantidad de espacio que tenemos. Un grupo pequeño puede ser de 2 o 3 personas, pero pequeños grupos funcionan mejor con seis u ocho. Los pequeños grupos de trabajo puede durar 15 minutos, una hora o un día, dependiendo de la tarea entre mano.

Lluvia de ideas

Image: BrainstormingLa lluvia de ideas es una forma de introducir un nuevo tema, fomentar la creatividad y generar una gran cantidad de ideas de forma rápida. Se puede utilizar para resolver un problema específico o la respuesta a una pregunta.

Cómo generar ideas:

  1. Decidir el tema sobre el que deseas buscar y formular en una simple pregunta o una afirmación.
  2. Escribe la pregunta en un trozo grande de papel o un panel colocado donde todos lo puedan ver.
  3. Pide a los participantes que contribuyan con sus ideas. Anota las ideas bajo la pregunta o afirmación. Utiliza palabras sueltas o frases cortas.
  4. Detén la lluvia de ideas cuando las ideas se acaban y, a continuación,
  5. Recorre las sugerencias, y pide comentarios.
  6. A continuación, resumen y, teniendo en cuenta el nuevo conocimiento, pasa a una actividad o discusión.

Las reglas de la lluvia de ideas:

  1. Anota cada nueva sugerencia. A menudo la parte más creativa o “loca” de sugerencias es la más útil e interesante.
  2. Nadie podrá hacer las observaciones o juzgar lo que está escrito hasta el final.
  3. Evita que se repita. Si alguien sugiere una idea que ya está, señala suavemente donde lo has escrito.
  4. Anima a todos a contribuir.
  5. Da tus propias ideas sólo si es absolutamente necesario alentar al grupo.
  6. Si una sugerencia es un poco confusa, pide una aclaración.

Pared escrita

Image: Wall writing

Esta es una forma de intercambio de lluvia de ideas. El facilitador escribe una declaración o una pregunta a explorar, preferentemente, en una amplia pared en blanco. Pero, en lugar de ser el facilitador el que escriba las sugerencias, los participantes escriben sus ideas en trozos de papel (por ejemplo, “post-its”) y ellos mismos los ponen en la pared. Las ventajas de este método son que los participantes pueden sentarse y pensar tranquilamente por sí mismos antes de verse influidos por la las ideas de otras personas, y los trozos de papel se pueden mover lo que ayuda a agrupar ideas durante la discusión.

El juego de asociación

Image: The association game

Esta es otra forma de intercambio de ideas que se puede utilizar como un rompehielos – icebrakers o como una introducción a un debate o a una actividad. Los participantes se sientan en círculo, y el facilitador comienza diciendo una palabra clave (una palabra que ha elegido y se encuentra en el corazón del tema que desea introducir). Alrededor del círculo, cada persona repite la palabra clave y a continuación la primera palabra, asociada con la palabra clave, que le viene a la cabeza. Una variación es que cada persona responda a la palabra la última persona.

 

 

Actividades de debate

 

Los debates son una parte integral de la EDH porque a través de la discusión los participantes aprenden a analizar la información, pensar críticamente, desarrollar destrezas de comunicación, compartir opiniones y aprender de la experiencia, que es la razón por la que la “reflexión y evaluación final” es una parte fundamental de toda actividad.Image: Discussion activities

Hay muchas maneras diferentes de celebrar un debate y algunas maneras, sobre todo aquellos que implican un cierto grado de cooperación y participación, pueden considerarse justificadamente por derecho propio actividades. Por ejemplo, en los debates en pequeños grupos en los que las personas tienen que resolver un problema por ejemplo, “Sólo un minuto” y “Hablemos de sexo” pueden ser considerados “actividades”. No es necesario decir que después de la “actividad de discusión”, los participantes siguen comentando y evaluando lo que han aprendido.

Las discusiones en grupos grandes

Image: Buzz groups

Grupos zumbido

Este es un método que resulta útil si no salen las ideas en un grupo grande de discusión. Pregunta a los participantes que discutan el tema en parejas o pequeños grupos durante algunos minutos y, a continuación, que compartan sus ideas con el resto del grupo. Pronto encontrarás la atmósfera de “zumbido” por las múltiples pequeñas conversaciones y los participantes producen el “zumbido” de ideas.

El ejercicio de la afirmación

Esta técnica permite a los participantes a expresar una opinión sin que necesariamente tenga que justificarla. Es una forma más suave para animar a los participantes a estar seguros de sí mismos al compartir sus opiniones.

Prepara algunas afirmaciones (4-6 deben ser suficientes) sobre un tema o temas que desea explorar con el grupo. Haz dos carteles con los mensajes “estoy de acuerdo” y “no estoy de acuerdo”, y colócalos en el suelo a una distancia de 6-8 metros. Si lo deseas, puede colocar una cuerda o una cinta adhesiva en el suelo, entre los dos signos para simbolizar la continuidad entre los dos extremos de opinión.Image: The statement exercise

Lee una de tus afirmaciones preparadas y pide a los participantes que se sitúen entre los dos extremos según su opinión; los que están indecisos en el punto central. Invita a los participantes, si así lo desean, a explicar por qué están donde están. Anima a los participantes a cambiar su posición a lo largo de la línea si, como resultado de los argumentos que escuchan, cambian su opinión.

Una variación se llama “puntos de vista”. Haz cuatro carteles con cuatro mensajes en las cuatro paredes de la sala: “Estoy de acuerdo”, pero no estoy de acuerdo”, “no sé” y “yo quiero decir algo”. Como antes, los participantes se sitúan de acuerdo con sus respuestas y pueden cambiar de posición en cualquier momento.

Pecera

Image: Fish bowl

Este método es una forma útil de obtener los participantes dirijan sus comentarios unos a otros y no facilitador o maestro. Invita a algunos (una ubicación ideal entre cuatro y seis) de los participantes a que se reúnan en un círculo pequeño en el centro de la habitación para hablar sobre un tema mientras todos los demás se sientan alrededor de la parte exterior y escuchan a “los peces en la pecera”. Cuando uno de los observadores desee contribuir al debate, se presentan y se sitúan detrás de uno de los “peces”. Este “pez” entonces ha de intercambiarse y unirse a los oyentes.

Hay varias ventajas al utilizar este método, la principal es que los participantes tienen el control de la discusión hasta el punto que una persona puede dar un paso adelante y hablar cuando decida pero también de otros miembros del grupo pueden cortar a alguien que esté haciendo largos discursos o se repita, obligándole a intercambiar

Debates

Image: Debates

Los debates tradicionales son útiles, especialmente en un aula donde hay menos posibilidades de discusión con otros métodos. Se dedicas toda una clase a debatir, por ejemplo sobre la afirmación “Esta clase considera que los Derechos Humanos son una invención occidental y no son universales” dejar que uno de los alumnos, en lugar del profesor, el moderador.

Otra forma de debate es un panel de debate en donde un grupo de “expertos” es invitado por los participantes para responder a sus preguntas. Esta es una buena manera de proporcionar información, promover investigación, permite a los participantes explorar diferentes puntos de vista y demostrar que los Derechos Humanos son complejos. Por ejemplo, a las tarjetas de roles de la actividad “La caza de las ballenas de los Makah” a ocho voluntarios (dos personas que representan a cada una de las cuatro organizaciones contendientes). Estas ocho personas utilizan las tarjetas para preparar sus posiciones y, a continuación, sentarse en el panel de expertos para responder preguntas y argumentar sus puntos de vista al resto de la clase. Al final, la clase puede votar sobre si la caza de ballenas debería estar o no prohibida.

Discusiones en grupos pequeños

Image: Discussions in small groups

Las actividades de debate a menudo se llevan a cabo mejor en pequeños grupos, porque entonces todos pueden contribuir mejor. Los participantes se sienten más seguros expresándose en grupos más pequeños sino cada uno tiene una mayor proporción del tiempo disponible para hablar.

Las actividades de debate dependen de algún estímulo material, que se presenta habitualmente en las tarjetas. Los ejemplos de estímulo material, incluyen los temas de las noticias en la televisión, carteles, tarjetas, caso de estudio y fotografías. Al preparar los estímulos materiales es importante que pienses en tu grupo y evitar incluir información que pueda causar ofensa o ser demasiado personal. También tienes que tener en cuenta el nivel de las aptitudes de lectura de los grupos más jóvenes, y las destrezas idiomáticas si trabajas con un grupo multicultural; en estos casos mantén un lenguaje sencillo. La información de las tarjetas debería ser lo más corta posible, preferiblemente 2-8 líneas y media hoja tamaño A4 como máximo absoluto.

AAA BBB CCC

Image: AAA BBB CCC

Esta es una técnica muy útil cuando se desea que desarrollen sus conocimientos y la comprensión sin tener que “enseñarlos”. Los participantes trabajan en pequeños grupos para desarrollar sus conocimientos sobre un aspecto de un tema. Los grupos a continuación se reagrupan y comparten sus conocimientos.

Prepara una tarjeta con una afirmación o pregunta para cada grupo acerca de una cuestión sobre la que deseas trabajar. Cada grupo trabaja en un aspecto diferente de la misma cuestión.
Consigue que los participantes formen tres grupos pequeños; uno de los grupos es el grupo A, el segundo es el grupo B y el tercer grupo el C. Cada grupo tiene un tiempo para debatir la cuestión o problema. A continuación se reagrupan, de modo que cada uno de los nuevos grupos contiene un miembro de cada uno de los grupos originales; en otras palabras los nuevos grupos se constituyen como ABC, ABC y ABC. La tarea de los grupos ABC es resolver un problema o llegar a un consenso que requiere la aportación de cada miembro.

Image: Statements in a hat

Afirmaciones en un sombrero

 

Esta técnica es una delicada forma de introducir un tema, hablar o generar ideas. Cada uno escribe una declaración o una pregunta en una tarjeta y la pone en un sombrero. Pasa el sombrero alrededor o colócalo en el centro del círculo. Pide a los participantes que cada uno saque una tarjeta y la comente.

El/la facilitador/a en lugar de hacer las tarjetas, puede pedir a los participantes que hagan sus propias tarjetas con sus declaraciones o preguntas. De esta manera las preguntas se pueden hacer anónimamente, lo cual es útil si se habla de temas que pueden ser muy sensibles.

Image: Ranking

Ranking

 

Esta es una variante útil de actividad de discusión cuando se quiere estimular un debate centrado en grupos pequeños. Necesita un juego de tarjetas para cada grupo pequeño; de nueve a doce afirmaciones. Selecciona afirmaciones simples y relacionadas con el tema que desees analizar y escribe una afirmación en cada tarjeta.

Los grupos discuten sobre las afirmaciones y tratan de llegar a un acuerdo sobre su orden de importancia. Esto puede hacerse como una escalera o como un diamante. Para el ranking en escalera la declaración más importante se coloca en la parte superior, la más importante debajo y así sucesivamente, hasta la afirmación menos importante en la parte inferior.

Para el ranking en diamante necesitas nueve tarjetas. Negocia con los participantes cual es la afirmación más importante, a continuación, las dos más importantes, a continuación las 3 declaraciones de mediana importancia, así como se muestra en el diagrama. Debido a que los temas son rara vez claros, el ranking en diamante es a menudo el método más adecuado de ranking. Es menos artificioso y por lo tanto, más aceptable para los participantes.

También ofrece mejores oportunidades para la crear un consenso. Una variación de este método de ranking consiste en escribir ocho afirmaciones y a dejar una tarjeta en blanco para los propios participantes escriban una.

 

Casos de estudio

Los casos de estudio son cortas “historias” sobre las personas y los acontecimientos que ilustran un problema. Como tarjetas, son herramientas útiles para presentar la información de forma didáctica. También son valiosos porque crea una distancia entre los participantes y el problema, lo que hace que el debate del tema menos peligroso. Por ejemplo, si hay acosadores en el grupo y que desea abordar el problema, se puede presentar una historia sobre el acoso escolar que tenga paralelismos con la situación real. Los participantes leen el relato del caso, analizan el problema y tratan de hacer sugerencias para resolver el problema.

Image: Case Studies

Teatro

Explorar las ideas y los temas a través de una obra teatral puede proporcionar a los participantes una salida para las emociones, los pensamientos, los sueños y la creatividad que de otro modo no podrían ser capaces de expresar. El teatro implica a toda la persona, sus mentes, corazones y manos y, por tanto, implica no sólo el intelecto, sino también los sentidos y las emociones, lo que lo convierte en una poderosa herramienta. Además, es una técnica más eficaz ya que atrae a participantes con todos los estilos de aprendizaje, es decir, a participantes auditivos, visuales, táctiles o kinestéticos.

La reflexión y la evaluación final son especialmente importantes después de las actividades teatrales, incluyendo los juegos de roles y las simulaciones. Los participantes pueden necesitar un tiempo para salir de la función antes de hablar de sus sentimientos y de por qué decidieron emprender ciertas acciones.

Juegos de rol

Un juego de rol es un cortometraje de ficción con los participantes. A pesar de que los participantes recurren a sus propias experiencias vitales, los juegos de rol son en su mayoría improvisados. Los juegos de rol pueden contribuir a mejorar la comprensión de la situación y fomentar la empatía hacia la gente que se presenta. Permiten a los participantes experimentar situaciones difíciles en un ambiente seguro.Image: Role-playing

Los juegos de rol se deben usar con delicadeza. En primer lugar, es esencial que los participantes tengan tiempo al final para salir del papel. En segundo lugar, todo el mundo tiene que respetar los sentimientos de los demás y la estructura social del grupo. Por ejemplo, un juego de rol sobre las personas con discapacidad deben tener en cuenta el hecho de que algunos de los participantes pueden sufrir una discapacidad (quizá no visible) o pueden tener familiares o amigos muy cercanos que estén impedidos. No deben sentirse heridos, obligados a exponerse o marginados. Si esto ocurre, tómalo en serio, pide disculpas y explícalo.

Se también muy conscientes de los estereotipos. Los juegos de rol sacan lo que los participantes piensan acerca de otras personas a través de su “capacidad” para reproducir o imitar. Esto es también lo que hace a estas actividades muy divertidas. En las sesiones de evaluación es útil preguntar: “¿crees que las personas que representaste son realmente así?” Siempre es educativo para que los participantes tomen conciencia de la necesidad de revisar constantemente la información de manera crítica, pregunta a los participantes de dónde tienen la información sobre la que basaron el desarrollo del personaje.

Simulaciones

LLas simulaciones pueden considerarse como juegos de rol estructurados y extendidos (que no implican el mismo grado de improvisación) que pone a los participantes en situaciones y funciones desconocidas. Por ejemplo, la sala del tribunal de la actividad “Acceso a los medicamentos”, que se define y se perfila, y en la que se da a los participantes información detallada sobre las funciones que se deben desempeñar. Las simulaciones exigen un alto nivel de implicación emocional y capacidad intelectual, especialmente para los jugadores que tienen que argumentar desde un punto de vista con el que personalmente están en desacuerdo.

Teatro foro

El teatro foro es una forma interactiva de teatro que promueve la interacción con el público y explora diferentes opciones sobre la manera de abordar un problema o asunto. El teatro foro (también conocido como teatro de Boal, “Teatro del Oprimido” o “Teatro para el Desarrollo”) fue creado en los primeros años de la década de los 70 por Augusto Boal, que quería así empoderar a su público.

El teatro foro es una forma de juego de rol. El público observa una obra corta en el que un personaje central encuentra una opresión o un obstáculo que él o ella es incapaz de superar; el asunto es presentado de forma que esté relacionado con la vida de la audiencia. Cuando la obra se ha representado, se repite y los miembros de la audiencia pueden subir al escenario y proponer otras opciones sobre cómo el protagonista podría haber actuado. Los actores exploran los resultados de estas elecciones con el público, creando una especie de debate teatral en la que las experiencias y las ideas son ensayadas y compartidas, generando solidaridad y sentido de autonomía.

El teatro foro es una herramienta muy útil para ofrecer la EDH, por ejemplo, al examinar los medios para resolver los problemas y resolver los conflictos. Permite al público tomar el escenario y explorar diferentes posibilidades. De esta forma, el evento puede ser utilizado para ensayar alternativas en un acontecimiento inminente, o para descubrir y analizar las alternativas en cualquier situación, pasado, presente o futura.

Métodos Audiovisuales

Uso de imágenes: fotografías, caricaturas, dibujo, collage

“Una imagen vale más que mil palabras”. Las imágenes son poderosas herramientas tanto para proporcionar información como para fomentar el interés. Recuerda también que el dibujo es un importante medio de expresión y comunicación, no sólo para aquellos cuyo estilo de pensamiento preferido es el visual sino también para aquellos que no se expresan muy bien verbalmente. Algunas ideas para actividades con fotografías y dibujos se presentan en el capítulo 2 bajo el epígrafe colectivo de “Jugar con las imágenes”.

Consejos para la creación de una colección de imágenes

Las imágenes son una herramienta versátil; es una buena idea que los facilitadores construyan su propia colección. Las imágenes pueden ser recogidas, por ejemplo, de diarios, revistas, carteles, folletos de viajes, tarjetas postales y tarjetas de felicitación.

Recorta las fotografías, colócalas en una tarjeta y cúbrela con plástico transparente adhesivo (que se vende para forrar los libros) para que sean duraderas y fáciles y agradables de manejar. La colección tendrá un aspecto más similar a un conjunto si las tarjetas son de un mismo tamaño. A4 es lo ideal, pero A5 es una buena solución práctica.

Una buena idea es escribir un número de referencia en la parte posterior de cada fotografía y la información sobre la fuente, el título original o cualquier otra información que sea útil guárdala en otro lugar. Así los participantes sólo tendrán la imagen a la que responder y no se distraerán con otras pistas.

A la hora de elegir las fotos, trata de obtener una selección de imágenes de norte, sur, este y oeste, así como de diferentes ambientes sociales y naturales. A la hora de elegir las fotografías de personas busca variedad y se conscientes de su sexo, raza, capacidad y discapacidad, edad, nacionalidad y cultura. También ten en cuenta el efecto que fotografías individuales tienen debido a su tamaño y color. Este efecto puede distorsionar la percepción de los participantes de una imagen, por tanto trata de armonizar tu colección para que sea relativamente homogénea.

No olvides comprobar si hay algún tipo de copyright en las imágenes y las fotos que deseas utilizar.

Películas, vídeos y programas de radio

Las películas, vídeos y programas de radio son herramientas poderosas para la EDH y son muy populares entre los jóvenes. Un debate después de ver una película podría ser un buen punto de partida para una tarea futura. Cosas de que hablar son la reacción inicial de los participantes a la película, lo verdadera que era respecto a “la vida real”, si los personajes son retratados con realismo, o si se trata de promover una política en particular o punto de vista moral, y no hay que olvidar que se trata de una violación de los Derechos Humanos.Image: Taking photographs, making films and videos

Comprueba si hay algún tipo de copyright o cualquier restricción sobre la proyección de los vídeos que deseas utilizar. La proyección en una clase o grupo de jóvenes puede constituir una exhibición pública.

Tomar fotografías, hacer películas y vídeos

La tecnología de videocámaras, cámaras digitales y teléfonos móviles hace que ahora hacer películas y fotografías sea mucho más accesible para todos. Las imágenes de los jóvenes y las películas demuestran claramente sus puntos de vista y actitudes y es un excelente material de exposición.

Video cartas

Las video cartas son una forma comprobada para romper las barreras y los prejuicios. Permiten a la gente que de otro modo no podrían reunirse cara a cara “hablar” y compartir ideas sobre cómo viven y qué es importante para ellos. Un ejemplo es un proyecto de televisión británico donde una mujer romaní y un residente cerca de un campamento gitano se negaban a hablarse. Sin embargo, un mediador logró convencerles de que se enviaran una serie de video cartas. Cada uno empezó mostrando sus hogares y presentando a sus familias. Gradualmente, en cartas posteriores, tras haber mostrado más tiempo de sus vidas, los prejuicios disminuyeron y fueron sustituidos por comprensión y empatía. Cada uno encontró que tenían mucho más en común de lo que imaginaban y, por último, acordaron reunirse en persona.

Los medios de comunicación: periódicos, revistas, radio, televisión, Internet

Los medios de comunicación son una fuente infalible de buenos debates. Siempre es interesante debatir acerca de las noticias o la información presentada y analizar prejuicios y estereotipos. Las discusiones pueden incluir aspectos como la propiedad de los medios de comunicación, la distorsión política, la censura y la libertad de expresión. La actividad “Primera plana” aborda específicamente estos temas y encontrarás más ideas en la información de apoyo de este material en el capítulo 5. Una vez más, asegúrate de comprobar los derechos de autor de cualquier material que desees utilizar.

11 Los T-Kits “Lo esencial de la formación” y “Gestión organizacional” proporcionan puntos de partida útiles sobre estilos de aprendizaje y las actitudes de los formadores y facilitadores. El T-Kit “Lo esencial de la formación”, publicaciones del Consejo de Europa, 2002. T-Kit “Gestión Organizacional”, publicaciones del Consejo de Europa, 2000. Se pueden descargar en www.youth-partnership-eu.coe.int
12 Brett, P., Mompoint-Gaillard, P. y Salema M. H. (2009) Cómo todos los maestros pueden apoyar la Educación para la ciudadanía y derechos humanos: un marco para el desarrollo de las competencias. Estrasburgo: Consejo de Europa
13 Gollob, R., Krapf, P., Ólafsdóttir, Ó., y Weidinger, W. (2010) Educar para la democracia: información de apoyo para la ciudadanía democrática y la Educación en los Derechos humanos. Estrasburgo: Consejo de Europa