Venerado desde el siglo IV, San Martín de Tours es uno de los santos cristianos más populares y reconocibles. Fue obispo de Tours, y su santuario situado en Gaul (Francia) fue objeto de una peregrinación muy importante, equivalente a la de Roma, a comienzos de la Edad Media, antes de convertirse en una famosa parada para los peregrinos que iban de camino a Compostela. Pasó toda su vida recorriendo incansablemente Europa, y dejó una impronta duradera en nuestra memoria colectiva.

Patrimonio

La Via Sancti Martini conecta muchas ciudades europeas que formaron parte de la vida de San Martín, así como las que poseen un patrimonio arquitectónico considerado importante por quienes le veneraron: miles de monumentos están dedicados a él, incluidas catorce catedrales. Estos sitios cuentan asimismo con un patrimonio inmaterial aún presente en forma de leyendas, tradiciones y folklore.

Viajar hoy en día

El viajero puede seguir las rutas que están relacionadas con los episodios de la vida, del culto y del folklore del Santo. Este conjunto de rutas, que abarcan más de 5000 km a través de toda Europa, lleva el nombre genérico de Via Sancti Martini. Cabe mencionar: 1/ la ruta que une Szombathely (Hungría), su lugar de nacimiento, con Tours (Francia), donde se encuentra su tumba, pasando por Pavia (Italia), donde creció, y 2/ la ruta que une Tours, donde fue obispo, con Worms (Alemania), donde abandonó el Ejército romano, y Trier (Alemania), donde conoció al emperador romano. Sin embargo, esta ruta une asimismo una gran parte de lugares del patrimonio cultural en el camino que pasa por Austria y Eslovaquia, y lleva asimismo a Szombathely. Otras rutas conducen a Utrecht, en los Países Bajos, y a Zaragoza, en España. La Ruta de San Martin abarca en total más de 12 países europeos.